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nindee

Una vez soñé...

Soñé que guardaba a mi gato en una caja de zapatos (porque a mi compañera de piso no le gustan los gatos y, cuando ella llega, lo tengo que encerrar en mi cuarto, esta vez soñé que lo metía en la caja de zapatos para que ella no lo viera). Resulta que, después de eso, se me olvidó allí, durante muuuucho tiempo, así que como no le daba de comer, empezó a adelgazar, a adelgazar, a adelgazar... Cuando, al tiempo, buscando un día unos zapatos, abrí la caja de zapatos donde lo olvidé, estaba allí, seco, como si fuera solo la piel y los huesos. Empecé a llorar diciendo "Lolo!! (así se llama mi gato) lo siento mucho, qué te he hecho!!". Así que lo cogí en brazos y empecé a darle agua y comida, y él empezó a engordar (pero esto en cuestión de pocos minutos), y volvió a ser el mismo de siempre. Pero de pronto, al día siguiente empecé a escuchar maullidos, y busqué por toda mi habitación. Encontré otro gato en una caja de zapatos, sequito, como me encontré a mi Lolo, e hice lo mismo, le dí agua y comida y engordó. Al día siguiente volvió a pasarme lo mismo; y al siguiente también; y al siguiente... Hasta que la habitación se me llenó de gatos, unos más pequeños, otros más grandes, otros que todavía estaban secos y... desperté.
No he vuelto a soñar con gatos.
Besos!!

3 comentarios

Memo -

¿Gatos? ¿Menuda pesadilla?

Pedro -

Voy a tener que contar un día de estos mis sucesivos sueños con ascensores.

Oranx -

El otro día soñé con mi ex jefa y te aseguro que es peor Un saludo